Uno de los primeros pobladores de Rufino fundador de la UCR y amigo de Irigoyen
Allá por 1905 cuando el caudllo radical huía de la capital tras los acontecimientos que lo alejaron de la turba en busca de reorganizar su partido, lo albergó en su hotel que se hallaba situado en donde se encuentra en la esquina de Italia e Irigoyen también donde funciono el bar “Ideal”. Durante el tiempo que estuvo allí refugiado se aventuraba a reunirse en el mayor de los secretos con muchos de los partidarios que ya lo rodeaban.
Cuando sus movimientos fueron un poco más tranquilos, y sin perder los minutos para la causa que bullía en su mente, con motivo de que había arrendado en Viamonte (Pcia. de Córdoba) el establecimiento “La Bolada”, don Hipolito llegaba periódicamente a Rufino. Desde aquí lo trasladaba en coche de plaza hasta ese pueblo el señor Canillán, que había cambiado de profesión. Deseamos decir de paso que Yrigoyen viajaba en coche con algunos amigos (en lugar de hacerlo en tren), con el objeto de visitar minuciosamente a la colonia que se estaba formando. Como ya dijimos antes, no perdía tiempo. Santiago Canillán era ahora, digamos, el cochero del pueblo y, en especial, de su amigo don Hipólito. Había cambiado también de domicilio y residía en aquel momento en el barrio General San Martín, en su propiedad, que se la ubica a una cuadra del dispensario "Angel Bulgheroni". Yrigoyen peleaba en todos los instantes de su lucha por el partido radical, y es así que comienza a hacer adherentes como lo muestran algunos documento histórico, en donde aparecen como primeros simpatizantes, con sus firmas estampadas como promesas, los señores Miguel Covián (h), Emilio F. Hansen, Carlos Delfini, Isaías Rojas, Ramón Villa, Nazario Hidalgo, Eustacio Bello, Pablo Bello, entre otros Y mientras que trabajaba por la zona de Viamonte, iba auscultando el pulso de este naciente pueblo de Rufino, pues cada vez que llegaba inmediatamente salían en el coche con el señor Canillán buscando la forma de lograr el afincamiento del partido en ésta. De tal suerte anduvo don Hipólito hasta el año 1912. Su figura de caudillo penetraba en distintas personas de nuestro medio, y al retirarse para su lucha grande, la presidencia del año 1916, quedaba arrojada la simiente en la pequeña población de aquel Rufino. Don Santiago Canillán, no bien iban transcurriendo los años, manifestaba a quien le quería oír y con su clásico acento criollo que en la casa de él había nacido la Unión Cívica Radical. Además, me dice que cuando don Hipólito Yrigoyen era ungido presidente de la República por el voto de los argentinos (2 de Abril de 1916), desapareció de la comarca don Santiago Canillán habiendo dejado entrever que debía alejarse en razón de que el 12 de Octubre del mismo año tenía que estar en Buenos Aires para llevar en andas a su amigo hasta la Casa Rosada. Había que respetarlo y ayudarlo otra vez si se ofrecía, pero no debía molestárselo porque estaba muy ocupado.
Como indicamos Canillan fue protagonista de varias actividades entre ellas la de Juez de Paz función esta que para la época principio de 1900 agrutinava un importante poder, que lo obligaba casi a gobernador la localidad atrás de una resolución N° 379. fechada en San Urbano, 29 Noviembre de 1892 enviada al Encargado del “Juzgado de Paz, don Juan A. Manzanarez en Rufino decia "Comunico a Vd. que esta “Gefatura por resolución de la fecha ha dispuesto nombrar a don Santiago “Canillán para desempeñar interinamente las funciones de Juez de Paz de esa “Colonia. En consecuencia se servirá Vd. hacer entrega a dicho señor, bajo “inventario. Del archivo y demás útiles pertenecientes a ese Juzgado. Dios “Guarde a Vd. – Firmado: V. Carreras”.
Se suma a su figura la participación en la fundaciobn de distintas instituciones y de tejer una prolifera amistad con los fundadores especialmente con Geronimo Rufino quien se afinco mucho mas que su hermano en la floreciente colonia.
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